domingo, 12 de noviembre de 2017

La Pardina del Señor

22 de Octubre de 2017
Es Otoño y hay una visita obligada y todavía pendiente para mi: La Pardina del Señor.
 ♪♫ George Winston - Woods ♪♫
En la Pardina del Señor.
El bosque de la Pardina del Señor o de Ballarín, aparece entre los más bonitos de España para disfrutar en Otoño. El punto de partida es el pueblo de Fanlo, aunque antes hemos dejado un coche en Sarvisé para el retorno. Bajamos menos de 1km por la carretera hacia Sarvisé y un cartel indica Buesa-Broto siguiendo las señales de la GR15. Bajamos por un sombrío pinar para cruzar el cauce del barranco del Xate por una sucesión de piedras colocadas en linea sobre el río. A nuestra derecha hay una bonita badina con su cascada. Mientras comenzamos a subir, un cartel indica que nos internamos en una propiedad privada y que no debemos salirnos del sendero. El arbolado cambia de manera radical al entrar en el bosque de la Pardina del Señor, pero ha sido en las últimas décadas de ausencia humana cuando realmente el bosque ha aprovechado para recolonizar el terreno arrebatado y volver a poblar unas laderas que antaño fueron aprovechadas para leña y pastos (1). Tras 1h 30' llegamos a la Pardina de Ballarín donde quedan las paredes de una gran vivienda, un pozo y restos de lo que fue una iglesia. Este el punto más alto de la excursión, pues ahora tenemos que recorrer los entrantes y salientes del barranco en dirección Oeste. La fama del bosque no es casualidad, donde no solo hay un tipo de árbol, sino que combina álamos, hayas, arces, avellanos, serbales de cazadores, abetos, fresnos, pinos silvestres, cerezos,  abedules, bojes, quejigos... algunos de ellos de hoja caduca. Tras 3h de tranquila marcha llegamos hasta las casas de San Esteban que en la actualidad pertenecen al pueblo de Buesa. En una campa a la solana hacemos un alto para descansar y comer algo antes de continuar la marcha. Al poco conectamos con una pista que baja, que nos puede servir de escape y que nos lleva hasta la carretera, muy cerca del chalet del Chate. Nosotros continuamos, cruzando el barranco del Baño de aguas medicino-sulfurosas. Las marcas blancas y rojas continúan, pasando cerca de la ermita de Bun. El bosque abandona todo el esplendor con el que nos ha estado acompañando y se vuelve algo menos esplendoroso mientras por medio de una pista llegamos al pueblo de Buesa (3h 30' sin paradas). Buesa tiene dos partes claramente diferenciadas. La parte alta donde se encuentra la iglesia y la parte baja donde está el núcleo más habitado. Después de pasear por sus calles, volvemos a la parte alta, junto a la iglesia, donde nos queda el postre final, bajar hasta el pueblo de Sarvisé por el camino del Quejigar (PR-Hu 118), por la margen izquierda del Bco Ribal. Desde el barrio bajo de Buesa también es posible bajar, pero por la margen derecha del barranco mencionado anteriormente.
Comienzo del sendero, bajando al barranco del Xate.
Cruzando el barranco del Xate.
Comienza el espectáculo.
Ganamos altura sobre gradas.
Caminando hacia la Pardina de Ballarín
GR 15
Llegando a la Pardina de Ballarín.
Pardina de Ballarín
Pardina de Ballarín
Tonalidades
Bosque encantado
Fuente de Cubillata
Casas de San Esteban.
En la pista que nos acerca a Buesa. Al fondo el Otal.
Ya tenemos a la vista Buesa.
Entrando en el barrio bajo.
Las calles de Buesa y sus merodeadores.
La iglesia de Buesa a la que volveremos para bajar a Sarvisé.
Senda del Quejigar.
Sarvisé desde la ermita de San Cristobal.
Mapa del recorrido.

lunes, 6 de noviembre de 2017

Llanos de Urbia

15 de Octubre de 2017
Cuarto y último día por los montes del País Vasco. Para hoy, algo muy tranquilo y relajado, pues luego nos espera el viaje de vuelta a casa.
♪♫ Huntza - Aldapan Gora ♪♫
Sencilla y relajada circular ideal para hacerla en familia, que parte desde el Monasterio de Arantzazu. La ida la haremos por Duru y la vuelta por el camino habitual para volver de nuevo a Arantzazu. Detrás del edificio de exposiciones, serpentea un sendero que va siguiendo unas marcas de GR (Donosti - Arantzazu. Ya la tengo en la lista de pendientes) que nos acerca a las Txabolas de Duru. Nos internaremos en un impresionante bosque, para salir posteriormente a una pista que cogemos de frente, con prados y arbolado en sus laterales, hasta que lleguemos a Eskista con su particular cabaña. A la derecha de ésta, sale una pista que rápidamente se pierde por unos prados, para recorrer, por zona alta, el monte, siguiendo una hilera de piedras en vertical. Llegamos hasta el collado de Iferrutz. Verde, todo es de color verde, menos el cielo, las rocas y los animales. Empezamos a descender por el barranco de Urbia, donde es fácil que pasemos junto a algún rebaño de oveja latxa, hasta llegar a los llanos de Urbia y su Fonda.
Subiendo hacia Duru ya nos encontramos los primeros potros
La senda bien trazada.
Nos introducimos en el bosque.
Las ovejicas a los suyo.
Txabolo de Eskista y junto a éste el desvío a la derecha.
Subiendo por los pastos a lo alto del monte
Más caballos, como éste, de talla sobresaliente.
Seguimos la hilera de piedras en busca del collado de Eferrutz
Bajando por el barranco de Urbia con el Aizkorri, Aketegi y Aitxuri de fondo.
Ovejas latxas haciéndose las muertas.
Ya estamos llegando a los llanos de Urbia.
Los llanos es un sitio especial, donde mayores y niños suben para pasar el día en este bucólico y pastoril lugar. Hay una fonda donde se puede comer, tanto en el interior del local como en las mesas del exterior. Otros, como fue nuestro caso, optamos por subirnos una mantica y tumbarnos a disfrutar del ambiente distendido y campestre. Tras un buen rato, nos tenemos que poner de vuelta hasta Arantzazu. Para ello, realizaremos un último repecho hasta el collado de Elorrola, por medio de un bonito sendero entre dos hileras de arbolado. Pasaremos por la ermita de Urbia y cerca de los dólmenes de Gorostiaran. Desde el collado, ya sólo nos quedará seguir la senda de bajada por un precioso y tupido hayedo, pasando por la fuente de Erroiti, donde mana un agua muy fría de una piedra con un réplica de la virgen de Arantzazu. Bajamos un poco más y llegamos, ya por fin, hasta el Santuario de Arantzazu.
Fonda de Urbia. ¿Qué me decís de tumbaros un ratico?
Ermita de Urbia.
Camino que nos deja en el collado de Elorrola para empezar el descenso.
A la sombra del hayedo.
Con las hojas caídas en el suelo.
Fuente de Erroiti.
Santuario de Arantzazu
Cuatro días con cuatro excursiones por los Montes Vascos que nos ha hecho recordar un viaje pasado, disfrutar del momento presente y mirar con esperanza el futuro.
El track de la ruta: 🚩


lunes, 30 de octubre de 2017

Txindoki. Circular al Cervino Vasco.

14 de Octubre de 2017
"Al norte del Aralar, se yergue majestuoso e imponente, encumbrado y denso, el peñascal de Larrunarri. Otros lo conocen por el nombre más típico de Txindokí..." Revista Pyrenaica.
El Txindoki desde Iturrene Jatetxea, merendero al que fuimos por la tarde.
La única vez que traté de ascender a esta cumbre, el fuerte viento hizo que me quedase a unos pocos metros de la cumbre. No exagero cuando digo que en el repecho final me tuve que dar la vuelta porque el viento levantaba pequeñas piedrecillas del suelo. Esto fue en el año 2003 y desde luego que no había tanta gente merodeando. Esta vez, un reguero de excursionistas como en procesión se disponían a disfrutar de un magnífico día.
Al llegar a Larraitz, punto de salida de la circular, el parking está a tope de coches. Cambiados para la ocasión, cruzamos la verja a las campas de Larraitz donde las vacas pacen sin inmutarse por nuestra presencia, acostumbradas al discurrir de la gente. Vamos subiendo suavemente por la pista y al poco cogemos una senda que comienza con escalones reforzados con troncos. La senda asciende en diagonal por un fuerte repecho hasta un pinar, ya en las faldas de la montaña. Seguimos caminando hasta llegar a la fuente Oria. No sé para qué hemos llenado las cantimploras si aquí hay agua incluso con pertinaz sequía, a una hora de haber comenzado a andar...  Desde aquí hay gente que asciende por el fondo del barranco hasta el collado de Egurral de manera directa, pero como hace la mayoría, seguimos por el sendero en diagonal, dando la espalda a nuestro objetivo cimero, para volver a cruzar de nuevo por una verja y, por zonas de prados, encararnos al collado pasando cerca de las bordas de Zirigarate Goikoa donde venden queso y sí, tambien hay una fuente. Ya en el collado de Egurral, a 1h 45' del comienzo, se aprecia con claridad la senda con fuerte pendiente por la que tenemos que superar un pequeño farallón rocoso por un tramo algo destrozado por el paso de montañeros, para después hacer una diagonal hacia el N.E. y después coger a la izquierda (Este) el último repecho hasta la cima del Txindoki. Fantásticas vistas desde el que llaman "el Cervino Vasco" y en el que en 2h 15' sin prisas hemos hecho cumbre.
Entrando en el bosque.
Caballos en las bordas Zirigarate Goiko
Y por supuesto, ovejicas de las de pelo, largo llegando al collado de Egurral.
Desde el collado de Egurral. Salvamos el pequeño farallón para después girar al N.E. (derecha)
Rampas inclinadas
Última rampa de Este a Oeste.
Pareja de zagales disfrutando de las vistas al norte. Fotógrafo delatado por la sombra.
Foto de cumbre
Venga! Otra foto de cumbre pero ésta vez con los pelos al viento.
De nuevo, como en el 2003, el viento ha sido nuestro compañero de ascensión, pero esta vez de manera más amable. Comemos alguna cosilla mientras disfrutamos de las estupendas vistas y emprendemos el camino de bajada. Todo el mundo se vuelve por donde ha subido pero encontramos una alternativa para hacer la excursión en circular, que es como a nosotros más nos gusta. Una vez llegados al collado de Egurral, bajaremos hacia nuestra izquierda por el barranco y sin abandonar la senda traspasaremos una valla. El camino se mantiene sin perder altura siguiendo las marcas de la PR-Gi2005, circular algo más larga, pero nosotros las abandonamos y tras haber superado la cascada de Muitze, damos un fuerte quiebro para pasar por su base. Habiendo cruzado el barranco de Urtzabal de nuevo en las laderas del Txindoki, encontramos una cruz que recuerda el fallecimiento de un joven y seguimos la senda entre el bosque cerrado por contínuos zig-zags. Atención a esta zona. Con mucha humedad o hielo, por su orientación, puede resultar peligrosa. Llegamos a una antena de telefonía y siguiendo por una pista, llegamos a los abiertos prados desde los que ya se ve abajo Larraitz, donde llegaremos tras dos horas de marcha desde la cumbre.
Bajando con las montañas de Larraone y Etitzegi.
Grandes extensiones de hierba hacia el Sur.
Al fondo la sierra de Aizkorri.
Bajando hacia el barranco.
La senda bien marcada por el paso del ganado.
Bajamos un poco más para cruzar una valla y después girar a la izquierda debajo de la cascada.
Cruzamos la cascada y el barranco de Urtzabal.
Bajando por el barranco de Urtzabal. Espectacular.
Vista atras de la ladera herbosa que baja a la cascada de Muitze.
Pequeñas cuevas (Salize -Aizpea) en la pared.
Preciosas vistas de bajada.
Otra excursión que no debemos perdernos. La verdad es que el Pais Vasco, con todas esas modestas montañas, enamora. Os dejo el Track de la ruta seguida.